El cliente, una diseñadora grafica amiga, nos pidió una casa que tenga algún diferencial respecto a las típicas casas de barrios, y que al mismo tiempo sea simple y discreta en cuanto a la imagen.

Otro de los requerimientos iniciales fue que el área de Cocina tuviese el mismo status de importancia y calidad que el resto de las áreas publicas de la casa. Es decir que no quede relegada como un área de servicio.

Pensamos una propuesta de casa en dos volúmenes separados vinculados por un conector. En el volumen del frente ubicamos las áreas de servicio y el gran espacio de cocina, como protagonista, y en el otro volumen que mira hacia el jardín ubicamos las áreas públicas, Living, Comedor, Playroom y en el piso superior los Dormitorios.

Entre ambos volúmenes se desarrollan dos grandes patios verdes, llenos de plantas y de vida, que brindan luz y silencio a los ambientes.

La estética de la casa es muy simple, revestimientos de colores claros, cementos alisados en los pisos y algunos toques de madera.

La fachada se desarrollo completa en tablas de madera de lapacho, en donde se oculta ingeniosamente la puerta de ingreso.

El producto final intenta ser una construcción minimalista, sin pretensiones y que genere el menor impacto en el terreno. Creo que se pudo lograr, gracias a la empatía generada con los dueños y su buen gusto.

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